Me ensimismo mas allá de tus ojos
Alaridos que corrompen el ritmo de mi sangre
Guerra santa entre tu piel y mi garganta
Vampiresca adicción de vivir en tu cuello de 301 grados
Recreo con mi lengua caminos en tus tímpanos
Me deslizo en tu vientre serpentina y marco territorio con mi lengua
Te descortezo el alma con gemidos
Tu me miras y pienso que eres bello
Acudo a conquistarme desde tu dimensión eréctil
Soy tu cruz y eres cada una de mis muertes “irresucitables”
Pecado redimido en el cielo de tu pecho
Me cercas agudo entre tu fuego
vuelas, mueres, naces y hurgas por mi entraña que te acuna feliz y Tu Volcán de magma inunda mi universo.
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